Un secreto a voces

Temporada tras temporada, cuando llegamos al final de las mismas, siempre hay un mismo debate sobre la mesa: los famosos 'maletines'. ¿Rumores o hechos comprobables? ¿Realidad o ficción? Sea lo que sea lo cierto es que no hay nada seguro. La posibilidad existe, ya que muchos equipos se juegan una gran parte de su presupuesto si mantienen la categoría, entran a jugar competición europea o consiguen el ascenso. Pero, en el hipotético caso de que estas prácticas se estén produciendo, ¿quién sería el mayor culpable, el que ofrece el maletín o el que lo recibe? Bajo mi punto de vista, la mayor sanción tendría que ser recibida por el club que recibe ese honorario por perder, ya que en el caso contrario yo eximiría de culpa al club receptor e involucraría totalmente a la entidad que emite ese dinero. En el deporte lo que prima es la competitividad, y variar ese factor para uno u otro lado debe de ser castigado y evitado, porque entonces el deporte deja de ser deporte. Y no coloco a la misma altura el caso de un equipo, por ejemplo, Barcelona, que ha ganado el título de liga y juega con los menos habituales y provoca que el Deportivo saque un punto del Camp Nou al supuesto caso de que el Levante muestre una dejadez más que sospechosa en el campo en su próximo partido frente al Zaragoza. No es lo mismo jugar con los menos habituales pero que estos lo hagan de forma competitiva que jugar con los teóricos titulares sin que muestren un ápice de interés en el juego. El problema reside en la dificultad para demostrar que determinado conjunto ha sido primado por dejarse perder y que debido a esa situación han caido derrotados. ¿Cómo podemos ofrecer pruebas sólidas sobre esto? Este será un tema del que oiremos hablar en los próximos días, especialmente en la ciudad que tenga la mala fortuna de que su equipo descienda a Segunda División.