
Ayer se cerraba el plazo para que los clubes de 2ªB saldaran sus deudas si querían mantener la categoría. 12 de estas entidades no lo hicieron y por lo tanto descendieron a Tercera División en 7 casos (Cultural Leonesa, Castellón, Rayo B, Poli Ejido, Alicante, Universidad de las Palmas y Palencia, que finalmente saldó su deuda en el día de hoy y se ha salvado) y a Regional en 5 casos, en los que ya habían bajado a Tercera por motivos deportivos ( Cerro Reyes, Jumilla, Estepona, La Muela y Benidorm) Esta decisión tomada entre la AFE y la RFEF es acorde a lo establecido en las leyes del fútbol de nuestro país, pero sería justo matizar un par de cosas. La primera es que, al igual que se ha impuesto la mano dura con los equipos de 2ªB, se haga lo mismo con los equipos de Primera y Segunda División que están en la misma situación, sería lo más justo. El segundo matiz es que el fútbol español en general no debería de criticar únicamente a los gestores de los clubes afectados y realizar una autocrítica general. ¿Porqué hemos llegado a esta situación? Que esto le suceda a uno o dos entidades deportivas no sería nada anormal, pero que le suceda a 12 si. Tal vez el listón económico impuesto a la Segunda B no sea acorde a los ingresos que reciben los clubes. Este parece ser un primer aviso, en el que 'solo' han estado implicados 12 clubes. El año próximo el aviso puede ser más serio o, directamente, la Segunda B vaya muriendo poco a poco asfixiada por la soga de la crisis económica. Hay algo que falla en esta categoria y parece ser que nadie se ha dado cuenta. O esto cambia, o la Segunda B se va a pique.